lunes, 1 de octubre de 2012

PESCA Y FOTOGRAFÍA

Tanto la fotografía como la pesca son dos artes que pueden ir de la mano y además son dos aficiones que combinan perfectamente.


A mí, como incansable devorador de revistas y cotilla máximo en blogs dedicados al mundo piscícola, me encanta ver una buena foto. Es de extrañar que los medios, sobre todo las editoriales que tienen revistas de pesca,  apenas hayan tratado este tema el cual veo muy importante y desde el cual sacarle mucho partido. Hoy en día, todo el mundo lleva algún tipo de dispositivo para capturar imágenes, llámese cámara de fotos o teléfono móvil. Aunque el primero nos dará mayores opciones de obtener buenas fotografías.

Las fotografías tienen algo especial, es el reflejo de un momento que se nos transmite en una imagen parada, una acción congelada que puede hablar por sí misma.
Todos aquellos que tenemos un blog o el inmenso privilegio de escribir en alguna publicación de pesca, es casi obligatorio ofrecer a nuestros lectores unas imágenes con un mínimo de calidad. De hecho, para mí es impensable hacer una salida de pesca sin mi cámara de fotos, prefiero dejarme las cañas de pescar que el mencionado artilugio pictográfico.

Una puesta de sol nos dibujará interesantes siluetas


Esta entrada no va a ser un manual sobre cómo hacer fotos, yo no soy fotógrafo y mis conocimientos sobre la materia son limitados, mucho más de lo que a mí me gustaría. Pero tranquilos, sacar una foto aceptable no es difícil, el secreto está en hacer muchas, pero muchas fotos sobre lo que queremos reflejar, y os aseguro que de entre esas muchas fotos que hemos sacado, habrá alguna que merezca la pena. Aún así, recomiendo a todo el mundo que tenga una cámara de fotos que se compre una guía de fotografía ya que allí encontrará útiles consejos y podremos sacarle mucho más partido a nuestra cámara, ya que de media, sólo usamos un 15% o 20% de las posibilidades que la máquina posee.
Hoy en día jugamos con una gran ventaja, y es que el formato digital de las cámaras nos han facilitatdo mucho la tarea, ya que podemos hacer tantas fotos como queramos sin tener que esperar a revelarlas en un centro especializado, con el consecuente ahorro para nuestros bolsillos.


Todo es fotografiable, además, éstos no se mueven!

En el mercado las hay de todos los precios y calidades. Ya sabemos todos que en el mundo de la pesca lo barato suele salir caro. Los entornos donde nos solemos desenvolver los pescadores son terreno hostil para los equipos electrónicos: aire húmedo, temperaturas extremas, superficies duras e irregulares, salpicaduras de agua de mar, salitre, arena ... son elementos que darán al traste con el mejor de nuestros equipos si éstos no van bien protegidos o los dejamos a la intemperie. Si a todo esto le sumamos que somos un pelín despistados( como sucede en mi caso), el resultado es fatal. En el último año y medio ya he perdido dos teléfonos móviles y una cámara de fotos que les están haciendo compañía a los peces...

El mar siempre sabe posar, sólo tenemos que estar allí.


Una buena solución, y por la que he optado, es una cámara sumergible y resistente a los golpes. Actualmente las marcas de fabricantes de cámaras de fotos estan sacando al mercado una sección de productos dedicados exclusivamente a los deportes de riesgo y acuáticos, con productos totamente fiables y con unas prestaciones a la par que sus primas de secano. Además, no se diferencian del resto, ya que no llevan una carcasa extra para impermeabilizarlas, son compactas y ligeras. Sin duda la más famosa es la Go Pro de Hero, pero marcas de prestigio como Sony, Pentax, Fujifilm o Canon tiene modelos muy atractivos y con un abanico de precios que varia entre los 150 € de una Fuji los 400€ o 500€ de una Sony o Pentax.

Las ventajas de las cámaras sumergibles.
A partir de aquí es jugar, conocer nuestra cámara, así como sus posibilidades. Observaremos que a medida que conozcamos nuestro equipo iremos huyendo de los modos automáticos para ir personalizando nuestras fotografías.

Estos son algunos consejos derivados de la relación entre la pesca y la fotografía:

  • LA FOTO NOCTURNA. Por mucho que nos pese, una foto nocturna tiene todas las papeletas de salir mal. Las cámaras fotográficas basan su trabajo en el empleo de la luz, y de noche la luz es mas bien escasa o nula. Además las linternas que usamos no ayudan mucho, confundiendo los sensores de la cámara. Lo ideal es usar un trípode para que podamos tener un período de exposición prolongado para evitar usar el flash y que la cámara no nos vibre (pero claro, ¿quien es el guapo que a todo el enorme equipo de pesca le añade un gran y aparatoso trípode, que, además hay que montar y desmontar?) También podemos aprovechar la escasez de luz para dar un tono sugerente o misterioso a nuestras fotos.
Luces y sombras, protagonistas de la foto nocturna
  • UN POCO DE DIGNIDAD. Aunque nos guste mucho pescar, esto no debe ir reñido con el respeto y aprecio hacia nuestras capturas. Me parece de bastante mal gusto las fotos hechas a los peces en un plato y en nuestra cocina. ¿Acaso no es mucho más bonito el pez recién capturado y el anzuelo todavía puesto, sobre las rocas, arena o nuestra barca? Así también podremos mostrar la librea del animal, que sigue todavía intacta recién capturado. Óbviamente la cosa cambia si lo que queremos enseñar es una receta de cocina o cómo preparar un pescado para su posterior degustación. Entonces lo que haremos es un bodegón acompañando al pez con el resto de los ingredientes
  •  LA SANGRE PARA LAS PELIS DE TERROR. Mostrar a un pez sanguinolento o la bañera de la barca llena de sangre es una cosa a evitar. Ya sufren los peces lo bastante como para mostrarlos de esa forma. No cuesta nada darles un remojón y después hacer la foto.
  • EVITAR LAS MATANZAS. Si capturar kilos y kilos de pescado ya perjudica bastante a nuestro entorno, es igual de malo reflejarlo en una foto e ir presumiendo de ello. No tiene nada de admirable una foto con 5 meros enormes o 40 gallos, aparte de ser un acto irresponsable que vulnera las normas vigentes sobre las cuotas pertinentes de las cantidades que podemos capturar.
  • PRIMEROS PLANOS, POR FAVOR. Si hacemos un buen uso del Macro de nuestra cámara obtendremos excepcionales fotos. Podremos deleitarnos con las libreas más detalladas o con el color de los ojos de nuestros peces.
La mirada de un túnido es sobrecogedora

  • FOTOS A TUTIPLEN. Todo, absolutamente todo es susceptible de hacerle una foto. Desde la típica foto posando con un pez, a unas cañas posadas sobre la arena, un pez saliendo del agua, un conjunto de rocas, o incluso la basura que llega a nuestras costas y playas puede tener su parte de belleza (una madera vieja con tornillos oxidados, o un manojo de hilo semienterrado.)

  •  FUEGO A DISCRECIÓN. Com se ha comentado antes, debemos hacer muchas fotos. Luego en casa ya elegiremos las que más nos gusten para publicar en nuestro blog o enseñar a la gente. 

  • RETOCAR EN CASA. No es conveniente usar sobre la marcha modificaciones de la cámara a la hora de hacer fotografías. Me explico, si queremos una foto en blanco y negro, en vez de usar la opción directamente desde la cámara, es mejor hacerlo en casa utilitzando uno de los múltiples programas informáticos que existen para retocar o modificar imágenes. De este modo a una foto la podremos variar tantas veces como queramos. De lo contrario, si hacemos una foto en sepia o blanco y negro, ya no la podremos cambiar en casa.
Estas son algunas de las posibilidades que nos ofrecen las cámaras de fotos y que debemos conocer:

  1. El modo de prioridad de abertura permite ajustar el diafragma, y la cámara ajustará la velocidad del obturador según ésta. Este modo es muy efectivo para controlar la profundidad de campo o la profundidad de enfoque, dejando el iris muy abierto para retratos o cerrándolo para capturar todos los detalles, tanto los más próximos, como una piedra o la boca de un pez, o como los más lejanos, como la perspectiva de una playa.
Jugando con los dos medios: mar y cielo.

  1. El modo de prioridad del obturador permite ajustar la velocidad del obturador, y la cámara se encarga de la abertura. Ésta es la mejor opción para fotografías de acción, como por ejemplo un pez saltando fuera del agua o las salpicaduras que produce un popper. Para esto usaremos exposiciones muy rápidas, para congelar el movimiento. En cambio, si queremos dar la sensación de velocidad, de nerviosismo o acción, usaremos una exposición lenta y la parte en movimiento saldrá borrosa o difuminada, en contraste con su entorno, que permanecerá estable.
No siempre es fácil capturar la acción y el movimiento
Os invito a todos/as a penetrar en este maravilloso mundo de la fotografía, mucho más similar al de la pesca de lo que nos pensamos, total, también se trata de hacer capturas, ¿verdad?

    2 comentarios:

    Raül Ortiz Tudela dijo...

    Tens raó Pep,
    els que estem implicats en publicacions professionals i revistes sabem de la importància de la imatge, malgrat alguns pensem que per fer gaudir al lector de la pesca, les fotografies no calen.


    Fa temps que em ronda una història molt maca i publicable en una revista de pesca. Evidentment, amb fotografies! Pesca d'Illes és la meva primera opció. Necessito una foto, només una.

    Pep Torres Roig dijo...

    Hola Raül,

    quant de temps sense saber de tú, encara que et vaig espiant a través del teu bloc.

    Què et ronda pel cap amic? segurament serà cosa bona...pareixes el capità Ahab a la cerca de la balena blanca!!